REAI CUM
Erase una vez en un lejano bosque de las frías tierras de
Escocia, existía un poblado de fuertes y agerridos hombres que luchaban por sus
vidas contra unas temidas criaturas llamadas Hipocamos.
Desde hacía años, que estos hombres vivían atemorizados por
dichas criaturas, aun que no siempre fué así. Hubo un tiempe en el que hombre y
criatura perseguian un mismo sueño, que era conseguir la libertad que el Rey
ArcarioII les había arrebatado, pero como en toda vatalla hay vencedores y
vencidos, el Rey ArcadioII con sus malas artes consiguió poner a los Hipocamos
de su parte prometiendoles tierras y grandes fortunas que por supuesto nunca
les daría.
En una de las duras batallas, que librabas los agarridos
Escoceses y los Hipocamos, uno de los líderes de la manada resultó gravemente
herido, en la antigüedad este líder había sidoun íntimo amigo de Joseph, un
herrero Escoces que le había hecho las herraduras de sus pezuñas, por un
momento Joseph al ver que el líder y amigo había resultado grabemente herido se
acercó a ver cual había sido el alcance de sus heridas, y sin mediar palabra,
Joseph posó sus manos sobre la terrible herida que una de las espadas que el
había fabricado le había causado y soltó un terrible alarido como si la herida
se la hubieran provocado a él.
Joseph cogió la espada que yacía en el suelo hincó su
rodilla en la tierra y con voz firme dijo: -Nunca más te volveré ha utilizar- y
de un solo golpe partió la espada.
El Hipocamo con las últimas fuerzas que le quedaban se puso
en pie y gritó con la voz grave que estas criaturas poseían escuchandose en
todo el bosque: -Reai cum- que en su dialecto significaba “ha llegado el fin”. Y es así como los
Hipocamos y los agerridos Escoceses se volvieron a unir contra una misma causa.